El colegio MET formó parte del taller del MIT (The Massachusetts Institute of Technology) gracias a la colaboración de Nord Anglia Education con dicha institución. Esta colaboración demuestra la excelencia que transmiten las escuelas que lo conforman. El taller permite que alumnos de diversos colegios que forman parte de Nord Anglia puedan visitar las instalaciones del MIT y absorber conocimiento valioso en el proceso.
Esta colaboración enriquece a los jóvenes no solo con los conocimientos y habilidades técnicas que adquieren, sino también con la emoción de vislumbrar de cerca el futuro y establecer relaciones durante su participación en el taller. Ser parte de este taller eleva significativamente el nivel de los colegios. Es importante resaltar el MET, ya que es el único colegio en las Américas que tuvo la oportunidad de enviar a dos de sus estudiantes, Alec S. y Jerónimo R., a vivir la experiencia del MIT.
¿En qué consistió el taller del MIT?
El taller organizado por el MIT tuvo lugar en Boston, Massachusetts, durante una semana. Un total de 50 alumnos de 31 escuelas de diferentes partes del mundo participaron en este evento, siendo seleccionados a través de un concurso STEAM de innovación y diseño. Durante cinco días, los estudiantes tuvieron la oportunidad de enriquecer su educación previa mediante diversas actividades, como conferencias, talleres y clases magistrales. Estas actividades fueron impartidas por estudiantes de doctorado, investigadores y profesores del MIT, reconocidos mundialmente en sus respectivas áreas.
El taller del MIT les brindó una experiencia inestimable al aprender directamente de profesionales y de las últimas tecnologías que revolucionarán el mundo. Les hizo ver, de una manera cercana e interesante, cómo los exoplanetas podrían albergar vida, los increíbles detalles que puede captar una cámara de imágenes de alta velocidad, así como la posibilidad de asistir y ver un simulacro de la Cumbre de la ONU sobre el cambio climático.
Esta semana de aprendizaje y experiencias terminó con un proyecto que consistió en la creación de un juguete sostenible e innovador que fuese utilizado en producción industrial. Estudiantes aplicados, y de todas partes del mundo, colaboraron para poner en práctica lo aprendido durante los cinco días.
Es relevante destacar que los jóvenes no se limitaron únicamente a las actividades académicas. Además, tuvieron la oportunidad de explorar los campus del MIT y de Harvard, así como disfrutar de un paseo en barco por la ciudad de Boston. Esta experiencia les permitió conocer el entorno universitario y disfrutar de momentos de esparcimiento y descubrimiento más allá de las aulas.
El propósito del taller del MIT
Aunque la colaboración con el MIT se centra principalmente en la educación STEAM (ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas), el taller no se limitó a ser una experiencia de aprendizaje técnico. La educación STEAM va más allá de la repetición y aplicación de conocimientos, ya que también fomenta habilidades adicionales en las personas, como la creatividad y el trabajo en equipo.
Creatividad y resolución de problemas
En la educación STEAM, por muy buena que sea, si no se fomenta la creatividad, la instrucción se convierte en una estéril repetición de saberes. Es por esta razón que el enfrentarse a desafíos y buscar soluciones fue una de las tareas principales del taller. El viaje a MIT les permitió a los estudiantes abrir su mente, ver reflejados los saberes que habían aprendido de maneras creativas y novedosas. El tener la posibilidad de conocer de manera presencial innovaciones y compartir les mostró una forma distinta de aplicar sus conocimientos.
La colaboración en un entorno interactivo
El campus del MIT fue el espacio perfecto para poner en práctica otro elemento del aprendizaje STEAM: la colaboración y el trabajo en equipo. Sin importar el campo en el que se trabaje, siempre es un desafío hacerlo en grupo cuando hay personas de todas partes del mundo y con diferentes conocimientos. No obstante, la formación integral de los colegios se vio reflejada en la comunicación e intereses sentidos y compartidos por los alumnos. El poder reunirse, compartir experiencias, y verse identificado con otros, fue esencial para los futuros profesionales.
El horizonte del MET
Para Alec y Jerónimo, el poder experimentar nuevas tecnologías, aprender junto a profesionales y establecer contacto con otras culturas y jóvenes que comparten sus mismos sueños fue un gran beneficio. El hecho de poder discutir, trabajar en equipo y poner en práctica lo que habían estudiado destaca la calidad de la educación y el alcance que ofrece el colegio MET. El hecho de que dos de sus estudiantes hayan tenido la oportunidad de participar en el taller no solo demuestra la excelencia de la institución, sino que también brinda una visión de un futuro prometedor para los jóvenes graduados del colegio.